¿Qué curso puedo hacer para ser administrador de fincas?
Recopilamos las opciones formativas que tienes para encargarte de la administración de fincas.

La figura del administrador de fincas es fundamental para una correcta gestión y mantenimiento de las comunidades de propietarios. Su labor abarca responsabilidades a nivel administrativo, económico, técnico o legal, ya que se encarga de gestionar los trámites administrativos de las comunidades de vecinos o de mediar en conflictos para buscar soluciones.
Si quieres llegar a ser administrador de fincas, en este artículo te explicamos los pasos a seguir:
Índice
1. ¿Qué hace falta para ser administrador de fincas?
2. ¿Qué titulación tiene que tener un administrador de fincas?
3. ¿Qué hace un administrador de fincas?
1. ¿Qué hace falta para ser administrador de fincas?
Para ser administrador o administradora de fincas en España hay varios caminos. Uno de ellos es tener una titulación universitaria (Derecho, Economía o Administración y Dirección de Empresas, entre otras) y colegiarse en el Colegio Profesional de Administradores de Fincas de la provincia donde se vaya a ejercer dicha profesión. Otra opción es realizar uno de los cursos reconocidos por el Colegio Profesional al que quieras inscribirte.
También necesitarás reunir ciertas habilidades, como por ejemplo capacidad de comunicación para tratar con todo tipo de vecinos, comprender sus problemas y explicarles las soluciones; empatía y paciencia para gestionar conflictos que puedan surgir; u organización para llevar al día la contabilidad, los contratos o las actas de las juntas.
Igualmente, los conocimientos básicos sobre leyes, sobre todo la Ley de Propiedad Horizontal, al igual que sobre contabilidad y gestión, te serán muy útiles para desempeñar tus tareas y asesorar correctamente a los propietarios.
2. ¿Qué titulación tiene que tener un administrador de fincas?
Generalmente hace falta tener una titulación universitaria como Derecho, Finanzas o Administración y Dirección de Empresas o una Ingeniería para ser administrador de fincas. Otra opción es realizar una formación especializada en administración de fincas que esté homologada y reconocida por el Colegio Oficial de la Comunidad Autónoma donde vas a ejercer la profesión.
Entre estos cursos y grados universitarios se encuentran:
· Diploma de Formación Superior en Administración de Fincas de la Universidad de Alcalá
· Grado Propio en Administración Inmobiliaria de la Universidad de Burgos
· Diploma de Extensión Universitaria en Estudios Inmobiliarios de la Universidad Politécnica de Valencia
· Curso de Administración de Fincas de la Universidad Nebrija
· Certificado Universitario La Propiedad Horizontal: Administración de Fincas Urbanas de la Universidad Pablo de Olavide
· Diploma de Extensión Universitaria en Gestión y Administración de Fincas de la Universidad de Málaga
· Título Universitario Superior en Administración de Fincas de la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria
· Grado en Economía y Gestión - Especialidad Gestión Inmobiliaria de la Universidad Abat Oliba CEU
También puedes solicitar información de estos cursos de administrador de fincas en Formazion:
· Administrador de Fincas. Gestión de Comunidades de IPFAP
· Curso Superior de Administrador de Fincas y Gestión de Comunidades de ELBS
· Administración de Fincas y Gestión de Propiedades de INF-Institut Numancia Formació
· Gestión de Comunidades de Propietarios de SURGE Centro de Estudios
3. ¿Qué hace un administrador de fincas?
Un administrador de fincas se encarga de gestionar comunidades de propietarios en todo lo relativo a la administración, cuentas, presupuestos, contratos, incidencias, etc. Entre sus principales tareas se encuentran la gestión administrativa, elaborando y ejecutando el presupuesto anual o convocando las juntas de propietarios y tramitando los seguros; o la gestión económica, como la contabilidad, control de pagos e impagos, o la gestión de los fondos comunitarios y del fondo de reserva.
También se encarga de supervisar el mantenimiento y las reparaciones del inmueble, gestionar siniestros que afecten a las viviendas de los vecinos, o verificar el cumplimiento de la normativa vigente en materia de seguridad, accesibilidad y habitabilidad. Es, además, el representante legal de la comunidad ante terceros, incluyendo administraciones públicas y entidades privadas, y quien atiende las consultas y reclamaciones de los propietarios.